Cuarto Paso para Llegar a Boston: MUDANZA

Al dejar un lugar para ir a otro hay cosas que se quedan en el camino, en ese ir y venir, del lugar de dónde venimos hacia el lugar a dónde vamos... Algo metafísico que impregna las cosas y los sitios, ese "algo" que sientes cuando volteas, ves el espacio vacío y sabes que habrás de cerrar la puerta para ya no regresar. 

Bueno, ese sentimiento de melancolía invadió mi corazón esta mañana cuando McCookie y yo cerramos la puerta de lo que fue nuestro primer hogar, adoloridos del cuerpo de tanto cargar y empacar, acarreando a un Bo sumamente confundido y triste, preocupados e ilusionados, pasamos de la certidumbre a la aventura en un instante, y nos convertimos oficialmente en  una  familia nómada.

Cada paso que hemos dado hace que estemos más cerca de nuestro destino pero creo que justamente, la mudanza, fue como esa primera manifestación de "es real, ya casi te vas". Así, podrán imaginarnos esta noche, la "jauría de Bo" (como solemos llamarnos cuando paseamos al susodicho), inseparables, McCookie sumergido en un sueño profundo, Bo roncando abajo de la cama y yo escribiendo en mi adorado blog, desahogándome un poco. Sé que si bien estamos los 3 juntos en esto para cada uno será diferente; McCookie tendrá  Harvard, Bo tendrá nuevas banquetas y yo, yo tendré posibilidades.

Mentiría lectores si dijera que la palabra "posibilidades" la mayor parte del tiempo no me viene más como "incertidumbre" y que no tengo miedo. Me pregunto constantemente si allá las muchas posibilidades se toparán con las pocas oportunidades, si podré hacer algo que me haga sentir bien conmigo misma y no me haga sentir ácido en el estómago cuando los compañeros de mi esposo sugieran que debería poner un puesto de sandwiches ya que no voy a estudiar en Harvard, sí, algunas personas pueden ser muy arrogantes incluyendo a McCookie.

Al final, desgraciadamente las cosas se tornan turbias, pensar en todo lo "posible" se vuelve abrumador. Todo mundo opina, ya no sabes si quieres demostrarte algo a ti mismo o si quieres  poner a los demás en su lugar,  si deseas algo genuinamente o si alguien más plantó la idea en tu cabeza... Simplemente sabes que estás harto de escuchar todo el tiempo la misma pregunta : "¿Y tú qué vas a hacer en Boston?"